En un año realmente crítico para la agricultura por la escasez de insumos imprescindibles y en que los consumidores hemos sufrido la pobre oferta y altos precios, Villa Clara ya se prepara para la campaña de siembra de frío que se inicia el primero de septiembre y se extiende hasta febrero, etapa en la que se logra alrededor del 70 por ciento de la producción.
Se trabaja en el montaje de un plan ambicioso de más de 34 mil 400 hectáreas, y lo que es más importante aún que la cifra global, asegurar el cumplimiento de las metas de los denominados cultivos rústicos, yuca, boniato, malanga y plátano, en cada municipio en correspondencia con las necesidades de esos importantes renglones.
Según José Luis Valladares Santana, subdelegado provincial de la agricultura para el reino vegetal se debe trabajar con prioridad el balance de semillas teniendo en cuenta la estructura de la campaña y las existencias que tengan tanto la Unidad Empresarial de Base de Semillas como los productores, porque será mínima la importada.
Valladares indicó aprovechar la mejor disponibilidad de combustible de las últimas semanas para adelantar la preparación de tierras y garantizar un buen cierre de la campaña de primavera e inicio de la de frio, única fórmula para asegurar las producciones del fin de año.
El subdelegado de la agricultura en Villa Clara señaló que como parte de la próxima campaña de frío resulta muy importante definir las áreas a plantar de papa para trabajar con tiempo la rotación y la colindancia con el objetivo de iniciar temprano la siembra.
La provincia demanda cerca de 25 mil hectáreas de manera global de plátano, yuca, boniato y malanga para satisfacer las necesidades de esas viandas denominadas rústicas y actualmente solo hay 15 mil en existencia según la estadística oficial lo que significa apenas el 62 por ciento de la superficie necesaria.